jueves, 13 de enero de 2011

¡Al chingadazo!


Si a gritos, y brutal honestidad, como en aquel día, en el que me dijiste, que te ibas...

Honestamente, me pregunte tanto, ¿por que?, ¡por que puta madre!, honestamente, mirando al cielo, cabron, así como diciéndole a Dios, ¡Vete a la verga Dios! Me da, luego me quita, perras mamadas las tuyas...¡Chinga tu madre!.

Pero me imagino a Dios, como un padre que mira a su hijo haciendo berrinche por que no le dan su juguete, diciéndose así mismo, te dejo que hagas tu berrinche, pues no entiendes, pero entenderás...


Y así lacerándome, con preguntas, ilusiones, fantaseando en ir y estar contigo, puta madre tener a alguien a mi lado, pues me siento solo, ¡muy SOLO!, pinche egoísmo, el mío, ¡no mames!.

A huevo, ¡A huevo! Que me aferró a esto, pues si siempre es lo que he deseado, he querido, llegar a lastimarme, a no aceptar la voluntad de algo superior a mi, pues solo quedaba aceptar y seguir...

¿Como? Pues esto me duele, ¿como seguir?, ¿Como aceptar? Recuerdo que estando allí en la habitación, haciéndome estas preguntas, resonó en mí, una vocecita que me decia muy suave, Déjate guiar, confía en mi, yo sé...

Ahora me digo a mi mismo...Fue perfecto, para que lo arruino aferrándome, si así, ya es perfecto, pues Dios me concedió amar y ser amado, con eso me basta, no tiene caso buscarle y hacer estupideces, entonces solo queda decir...

GRACIAS

1 comentario:

  1. Siempre a sido perfecto.asi fue y asi sera siempre.
    te extraño mucho!

    ResponderEliminar